jueves, 29 de diciembre de 2011
Wakan Tanka
Ovejas negras
(Carlos Arboleda López. Quito, Ecuador. 1990-1996.)
miércoles, 2 de noviembre de 2011
Lorem ipsum
No es en tu rostro que tu rostro habita
no es en tu mano donde mora tu caricia
habitan en el punzón que con paciencia
tatúa cada surco que atraviesa
un músculo,
lluvia nueva
en calle vieja.
(Carlos Arboleda López. Pfaffenthal, Luxemburgo. 1998.)
Lecturas
La fisura en una piedra
la flama que enmelena una cerilla
cada arruga de tu frente
espirales recurrentes
la mancha en la madera
la ligereza del pétalo
el hematoma tras el atraco
aromas
los movimientos simulados
de la música
.......................cada fina
...........................................piel.sábado, 10 de septiembre de 2011
Revisited
La cera chorrea y se lleva colores y escorzos
nos reduce a postal mal fotografiada
escenario en que arden las naves
arde su fuego, arde su humo, arde su agua
la mano de Rubalcaba se desconcierta en la corbata de Monk
la música, drakkar eterno, sobrevive a tanto humo
a sí misma
última, dorada nota de Miles, que es decir lo mismo.
Las máscaras de madera se vuelven de papel
las caras, tallos mal afilados
las fotos, dedos en la ceniza
el mundo, un único sonido
la cera, un múltiple silencio
Quito, una piedra más a Sísifo.
Y se desparrama igual
se sobrevive igual.
“Vámonos a beber lo ya bebido”. Vallejo, creo.
un verdugo, este Vallejo.
Por lo demás, la cera
el silencio.
(Carlos Arboleda López. Quito, Ecuador. 1997.)
Jonás
Hace tiempo que descreo de los fuegos de artificio
y he permanecido inmóvil aquí ya demasiado.
Soy Jonás en la ballena.
Nínive me espera.
(Carlos Arboleda López. Quito, Ecuador. 2011)
jueves, 8 de septiembre de 2011
domingo, 17 de julio de 2011
Todo a cambiar
Un día me fui
un día nos dejamos de hablar
no entiendo qué pasó
después me encontré
buscando una lejana ciudad
debajo de tus pies
por eso vamos, vamos, vamos
a continuar
por eso vamos, vamos, vamos
todo a cambiar
recuerdo te vi
llorando la partida de un tren
no vamos hacia atrás
no voy a esperar
mirando las bandadas pasar
no hay nadie en tu lugar
sé que nunca es fácil
volver a comenzar
crear y destruir son parte de este ritual
no hay nada que ocultar
cuando la luz tiende
su abrigo
un día volví
noticias vi de un mundo al revés
y todo andaba igual
después te encontré
buscando una lejana ciudad
debajo de mis pies.
(Carlos Arboleda López. Bascharage, Luxemburgo. 2005.)
jueves, 23 de junio de 2011
Mientras espero en un almacén de centro comercial
El empleado de la sección ALFOMBRAS espera durante dos horas algún cliente. No llega ninguno. El empleado sale a almorzar. Regresa. Dos horas más tarde llega un cliente: un faquir que busca una alfombra voladora. El empleado queda desconcertado, no sabe qué hacer. El faquir se va descontento. A la noche el empleado renuncia.
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Un niño de cuatro años tropieza en un repliegue de la alfombra y acaba de endeudarse de por vida al caer de bruces sobre toda la sección CRISTALERÍA.
(Carlos Arboleda López. Quito, Ecuador. 1996.)
Será
¿Será
que perdimos la razón
que quisimos retrasar
manecillas de un reloj
sentir
esta rara sensación
de ser libres, no será
que perdimos la razón?
(Carlos Arboleda López. Quito, Ecuador. 1989.)
martes, 21 de junio de 2011
Nunca inventamos nada
jueves, 26 de mayo de 2011
Poema
Vive sin el contexto.
¡Ahí te quiero ver,
ratita borracha,
hormiga sin antenas,
flor verdadera!
Si tan sólo Bashõ
ante el vídeo, ante el hi-fi...
¡Vamos a ver flores verdaderas!
Aun las que velan muertos.
(Carlos Arboleda López. Luxemburgo. 1998.)
martes, 10 de mayo de 2011
Teatro no para cualquiera
Tomarás la calle angosta
sabes bien cómo llegar
la foto y su negativo
una extraña paridad
una doble exposición
mirarás que no haya nadie
sabes bien cómo jugar
agujeros bicolores
el peso y la levedad
es muss sein, casualidad
y te vas entre las sombras
y no encuentras tu lugar
y te ríes y te niegas
y te vas de ti
y te vas de ti
y te vas
entrarás sin darme cuenta
la ceguera de rigor
la nariz como de groucho
no te sienta nada mal
six, sax, sex. carnaval
un placer entre las piernas
anestesia de rigor
eres como un anagrama
como un cuadro de Magritte
pero no eres más de ti
domingo, 8 de mayo de 2011
Venus violeta
sábado, 7 de mayo de 2011
Reivindicación de Zenón
Al compás de los quelonios
se nos viene el tiempo encima
como boca de lamprea
dentro de sus gabinetes,
nuestros propios extranjeros
dan el último brochazo
a cada uno de sus lienzos
y se entregan al dilema:
¿emprender otro proyecto,
desarmar rompecabezas?
en tanto, nosotros,
al compás de Aquiles,
sentimos la válvula absorbente;
nos corresponde, entonces,
el silencio imperturbable, involuntario;
nos corresponde, entonces,
el aúllido mudo, voluntario;
nos corresponde, entonces,
contemplar a la Venus de Milo
cubrirse los senos con las manos.
martes, 3 de mayo de 2011
Polución
Quiero verte hoy en medio de esta polución
quiero acordarme de tu voz
de aquellas horas sin reloj que amábamos
y quiero imaginar que nunca más, ya nunca más
tendrás que estar lejos de acá
que no te extrañaré jamás de nuevo
cuánto tiempo más debe pasar
en esta sórdida ciudad
para que en medio de esta gente
pueda decirte frente a frente
"quiero morirme junto a vos"
y cuánto tiempo más debe pasar
entre la piedra y el metal
para que en medio de esta gente
pueda decirte frente a frente
"mi amor es para vos"
lejos de ese dios hecho de piedra y de cartón
un corazón de perdición
prefiere salir a olvidar la ausencia
y es que yo quiero verte hoy en medio de esta polución
quiero acordarme de tu voz
de aquellas horas sin reloj que amábamos.
(Carlos Arboleda López. Quito, Ecuador. 1991.)
martes, 19 de abril de 2011
Poema de amor
Te mueves
y cantas
y estás hermosa
como un canarito
lo que mejor te queda
es la jaula.
(Carlos Arboleda López. Quito. 1995.)
viernes, 15 de abril de 2011
Dicen que...
que no tengo piedad
que no tengo vergüenza
que vivir por un ideal
es asunto mortal,
un dolor de cabeza
quizás se apague una sirena de ambulancia
quizás regrese y que valga su redundancia
dicen que a la buena de dios
que no tengo perdón
ni razón ni certeza
tienes que entender, por favor
yo no soy como tú
ni como tú deseas
yo también tuve mis lecciones de acrobacia
me paraliza machacar la tolerancia
si algo me atrapa no me voy a atrapar
si alguien murmura no me voy a enterar
si algo se escapa es que no es casualidad
si el tiempo cambia, cambia en todo lugar
y cada paso siempre lleva a un portal
y cada lluvia siempre me va a mojar
dicen que me vieron partir
que me vieron morir
que colmé su paciencia
dicen que nunca te escribí
dicen que me vendí
que ya no hay quien lo entienda
superstición, manejarás las alabanzas
jueves, 14 de abril de 2011
jueves, 7 de abril de 2011
En el rostro de Medusa
cuánto espero que no pares
de cantar
cuánto pides, cuánto entregas
cuánto quiero que no pares
de cambiar
y mientras tanto
cortas los lazos
ya nunca más
ya nunca más
en el rostro de Medusa
la mirada clavar
saber
que una zarza ardiendo no siempre da fe
las topografías destejen la red
una vez muerto el heraldo parte el tren
animula vagula blandula
ojalá ya sepas
darte paz
Judas Iscariote de ti misma:
monedas al alba
pesan más
rompes un trato
vuelan los mantos.
(Carlos Arboleda López. Quito, Ecuador. 2006.)
martes, 15 de febrero de 2011
Matte kudasai, Ericeira, crepúsculo
Fachadas azules hilan un collar que rodea el mar
a lo lejos, un horizonte,
sutil límite entre la vida pasada y la de hoy,
a lo lejos, América, aunque no la vea,
otra frontera, los espacios;
del otro lado estás en un tiempo paralelo,
seis horas más temprano,
soy un almirante llevando este continente navío
a la deriva,
tirante,
atado cual Ulises a su mástil,
atado al canto de la saudade.
En Ericeira atardece,
se ve, voy llegando a ti.
me habrás olvidado ya.
yo solamente recojo piedritas de la playa,
mientras otra gente observa pinturas y artesanías
y a veces habla en portugués y otras en español,
mientras ya es hora de marcharse.
Hay que volver a Mafra,
hay que volver a Lisboa, a Évora,
a Badajoz, a Mérida, a Madrid,
a la vida papel cuadriculado,
a otros abrazos y besos
y otras cenas y paseos,
a otras burocracias,
es una lata andar indocumentado,
disimulando la paranoia,
acudiendo a un trabajo al que se debe uno agarrar etcétera
y a los cursos
y a los conciertos;
todos esperan algo de uno,
hacerlos olvidarse un poco
y reír cuando se puede.
luego las cañas,
la mesa y la cama compartidas
y un pensamiento
que se ha quedado en la playa portuguesa,
con la esperanza de llegar a nado
a otra costa,
a otro tiempo,
a otra piel.
(Carlos Arboleda López. Ericeira, Portugal. 2002.)
lunes, 14 de febrero de 2011
Poema
Pensar que escribí poesía
pensar que era una mujer
y solo una.
y yo, un hombre.
et une ombre.
y un hambre.
saber que la poesía te escribe
te posee, te relame, te vomita.
Orondo
.............y hondo
............................fondo.
(Carlos Arboleda López. Luxemburgo. 1998.)